Se abre puerta de diálogo entre gobierno y disidencias, ahora reconocido como grupo guerrillero.
Este sábado 17 de septiembre, el Comisionado de Paz Danilo Rueda y las disidencias de las Farc, se reunieron en el departamento del Caquetá en lo que se ha definido como la apertura de una puerta política para el cese bilateral del fuego
Tras la reunión entre el Gobierno, representado por Danilo Rueda, y las disidencias representadas por cuatro integrantes del grupo armado, se expidió un comunicado en el que se reconoce al grupo como guerrilla.
De acuerdo con lo conocido, los representantes de las disidencias, reconocidas como FARC- EP, fueron autorizados mediante previa consulta interna de todas las estructuras de esa organización hoy bajo el mando de «Iván Lozada».
En esta primera reunión exploratoria en la que participaron, además, un delegado del gobierno noruego y un representante de la Misión II de la ONU , se reconoció al grupo armado como las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia-Ejército del Pueblo, más no como un grupo disidente.
Entre los puntos que se destacan del texto es que se abrieron las puertas a un cese bilateral al fuego, una de las necesidades para que se llevan a cabo de forma adecuada los diálogos, de la cual su ejecución deberá ser verificada para que se pueda plantear un segundo acercamiento.
El grupo armado señaló cuatro puntos relevantes para conseguir la paz total a la que apunta el Gobierno del presidente Petro:
- La Paz Total para las FARC EP, significa la erradicación de las causas generadoras del conflicto social y armado. También compartieron sus inquietudes y afinidades con el propósito de Paz Total expuesto en la política del gobierno nacional.
- La declaratoria -lo antes posible- de un cese al fuego bilateral verificable acordado por las partes, evitando así más dolor en la familia colombiana, como primer paso para un segundo acercamiento.
- Para el inicio de diálogos serán consultadas todas sus estructuras.
- La importancia de la participación de terceros neutrales como garantía en los diálogos hacia la Paz Total
Entre ambas partes acordaron firmar un protocolo de confidencialidad para que así se garantice una reunión con los altos mandos de la guerrilla de las FARC EP.
Este reconocimiento del gobierno Petro a las disidencias como guerrilla de las FARC-EP, evidencia la clara división que hubo entre los hoy representantes del partido Comunes ( partido que surgió de la desmovilización de un sector de las FARC-EP durante el gobierno Santos y los acuerdos en la Habana, Cuba) y las bases de esta guerrilla.
División que persiste y que se ahondó con la renuncia de 300 militantes a dicho partido.
Analistas internacionales consultados por HOY Noticias , explican que frente a este anuncio «es importante tener en cuenta que las FARC-EP nunca desaparecieron puesto que el grupo de Gentil Duarte no hizo parte del acuerdo firmado; este importante reducto de la guerrilla marcó distancia de los diálogos desde el principio» .
Agregan los expertos en materia del proceso de paz que luego de la salida del «Acuerdo» por parte de Iván Márquez, Romaña, Santrich, Calarcá (Andrés Díaz), el Paisa, entre otros, los que negociaron (Timochenko, Pablo Catatumbo y Carlos Antonio Lozada), cambiaron el nombre de Fuerza Alternativa del Común por COMUNES, en un reconocimiento tácito a quienes decían seguir siendo FARC-EP.
Es decir, los disidentes de las FARC-EP no fueron quienes se quedaron en el monte, si no los que se fueron a negociar.
En este orden de ideas, y de acuerdo con los analistas, «el hecho noticioso no es que se reconozcan a las llamadas ´Disidencias´ como FARC-EP, puesto que quienes los llamaban así era el mismo gobierno Santos y, por supuesto, el hoy muy reducido grupo de Timochenko. Lo que debe ser noticia es que se va a negociar con un importante reducto de las FARC-EP, y no que el gobierno Petro les haya reconocido el nombre como guerrilla. Guerrilla siempre ha sido y no han dejado de ser. Fue el gobierno Santos quien se sacó de la manga ese remoquete de ´disidencias´. Por lo tanto, el documento no lo iban a firmar los guerrilleros considerándose ´disidencias´, cuando en verdad las y los disidentes fueron quienes negociaron».
