Voceros del gobierno de Costa Rica, informaron que como medida para frenar la propagación del coronavirus, se ordenó el cierre de todas las playas en el país.
Así mismo, el presidente Carlos Alvarado, comunico que la restricción va para los templos religiosos.
Este año no se realizarán los actos tradicionales, propios de la Semana Santa y las iglesias deberán cerrar las puertas hasta nueva orden.
El jefe de la nación costarricense, explico que: “Estamos en un momento cumbre para reducir el impacto del contagio en el país. Acatemos las indicaciones de las instancias de salud y seamos responsables como ciudadanos, ayudemos a quien más lo necesite y no expongamos a las personas vulnerables”.
También advirtió lo siguiente: «todo extranjero residente o con estatus regular en el país que abandone el territorio nacional, pierde automáticamente su estatus migratorio».
La semana inicia con 158 contagiados por la pandemia, de estas personas, 17 son extranjeros, y 141 son costarricenses. Se han registrado 2 muertes.
Igualmente se estableció una restricción para todo el transporte del país, a partir de las 10 de la noche hasta las 5 de la mañana. La medida empezara a regir partir de esta semana. Las personas que incumplan la norma, tendrán graves sanciones.
«Los detalles sobre a quiénes le cubre dicha restricción y las excepciones contempladas se harán públicos el día de mañana.
Quienes incumplan restricción se exponen a la multa de tránsito de 22.187,93 colones (unos $ 45 dólares)» Dijo el primer mandatario en una rueda de prensa.