Corte Suprema condenó a excongresista César Augusto Pérez ,por homicidio de Elkin Martínez
La Sala Especial de Primera Instancia de la Corte Suprema de Justicia condenó al excongresista liberal César Augusto Pérez García como determinador del homicidio de Elkin de Jesús Martínez Álvarez, alcalde electo de Remedios (Antioquia)
La Sala le impuso una pena de 279 meses de prisión, e inhabilidad de derechos y funciones públicas por 10 años.
Igualmente, dispuso negar al sentenciado la condena de ejecución condicional y la prisión domiciliaria. En consecuencia, una vez en firme dicha determinación deberá librarse orden de captura en su contra para el cumplimiento de la pena privativa de la libertad que se le impone.
Los hechos están relacionados con la violencia política registrada en 1988 y la pérdida del poder del excongresista en los municipios del nordeste antioqueño, entre ellos Segovia y Remedios, cuyos espacios estaban siendo copados por la Unión Patriótica.
La Sala Especial de Instrucción determinó que Pérez García perteneció a la cúpula de un grupo paramilitar, en el que tuvo una posición de influencia y mando, y desde allí presuntamente dio órdenes para eliminar a los militantes de la UP en municipios del nordeste antioqueño, como Vegachí, Segovia y Remedios, en donde había perdido poder político.
De acuerdo a la investigación, Pérez García, entró en contacto con los paramilitares Fidel Castaño y Henry de Jesús Pérez, jefes del grupo armado ilegal autodenominado «Muerte a Revolucionarios del Nordeste», a quienes les pidió su ayuda con el propósito de que procedieran a expulsar a sus líderes de esa región; éstos, a su vez, acudieron a Alonso de Jesús Baquero Agudelo, alias Vladimir, quien en cumplimiento de dicha orden se dedicó a perseguir a quienes el excongresista consideraba sus contradictores políticos, mediante amenazas de muerte.
En ese contexto se registró el homicidio el 16 de mayo de 1988 de Elkin de Jesús Martínez Álvarez cuando se encontraba en la puerta de un hotel de la capital de Antioquia esperando un taxi.
Es de recordar que el exrepresentante Pérez García se encuentra en casa por cárcel y paga una condena de 30 años por la masacre de Segovia, Antioquia, crimen ocurrido en 1988.
Esta condena es la más alta contra algún ex representante a la Cámara. El proceso duró poco más de 10 años, y la Alta Corte sentenció a 30 años de prisión al cacique liberal antioqueño César Pérez García, tras hallarlo responsable de la muerte de 43 personas, en hechos ocurridos el 11 de noviembre de 1988 en el municipio de Segovia, nordeste antioqueño, y que se conocen precisamente como “La masacre de Segovia”.
La Corte valoró los testimonios aportados por uno de los autores materiales del macabro crimen, Alonso de Jesús Baquero, alias ‘El Negro Vladimir’, quien declaró que Pérez García le pidió a las nacientes autodefensas del Magdalena Medio, comandadas por Henry Pérez, que sacaran a la Unión Patriótica de Segovia, partido político que precisamente venció en este municipio al Partido Liberal en las primeras elecciones populares de alcaldes que tenían lugar en el país.
Pérez, oriundo del municipio de Remedios, vecino de Segovia, se desempeñó por cinco períodos como Representante a la Cámara; además, ha sido diputado de Antioquia y fundador del movimiento Convergencia Liberal, un sector del Partido Liberal en Antioquia. También fue el fundador de la Universidad Cooperativa de Colombia, la cual cuenta hoy con diversas sedes en todo el país. Su vida política ha estado asociada a prácticas de corrupción. Perdió su curul en la Cámara de Representantes en enero de 1994 y su asiento en la Asamblea Departamental de Antioquia en el 2010. Fue condenado a ocho años de detención domiciliaria tras comprobársele malos manejos administrativos cuando se desempeñó como Presidente de la Asamblea en 1998.
En audiencias ante fiscales de la Unidad de Justicia y Paz, los ex paramilitares Fredy Rendón Herrera, alias ‘El Alemán’ y Raúl Hasbún, alias ‘Pedro Bonito’, indicaron que Pérez García fue uno de sus financiadores y socio en negocios relacionados con las apuestas del chance en la región del Urabá antioqueño a finales de la década del noventa y comienzos del 2000.