El juicio se encuentra en la última etapa antes de conocer la decisión de la juez, si condena o absuelve.
Vladimir Cuadro, procurador delegado en el juicio que avanza contra el expresidente y líder del Centro Democrático Álvaro Uribe Vélez solicitó, durante su intervención en los alegatos finales de este proceso, que el exmandatario sea absuelto.
De acuerdo con la Procuraduría, durante el juicio no se presentaron pruebas contundentes que vinculen al líder del Centro Democrático como posible responsable de los delitos de fraude procesal y soborno a testigos.
Cuadro señaló durante su intervención que los testimonios de personajes clave, como el de Juan Guillermo Monsalve, no tuvieron el peso suficiente para sustentar una condena contra el exmandatario.
“Por ende, la conclusión a la a que se debe llegar, como representantes de la justicia, es que no hay prueba que permita configurar los presuntos punibles de soborno a testigos en actuación penal y fraude procesal. La postura que ha dejado de manifiesta este delegado ha sido consistente con la postura de los procuradores que me antecedieron en este cargo y es el resultado de una valoración conjunta y objetiva de los medios de prueba propio de un derecho penal”, explicó Cuadro.
Uno de los argumentos centrales del representante del ministerio público tuvo que ver con la interpretación que se le dio a las interceptaciones telefónicas entre Álvaro Uribe, Diego Cadena y su círculo cercano.
El delegado apuntó que el contenido de las conversaciones no permite concluir que haya existido una intención por parte del expresidente por sobornar testigos o de ordenar a terceros para que lo realizaran. Por el contrario, insistió que Uribe Vélez mostraba el interés de que el acercamiento con los testigos se hiciera con apego a la ley.
“Si se aceptara que las conversaciones buscaban revelar licitud y no encubrir una conducta ilícita, entonces otro debió ser el momento fáctico en que se habría dado la supuesta determinación criminal. Pero ese momento no aparece en la práctica probatoria, no se evidencia que existiera delito”, agregó el procurador.
El delegado del Ministerio Público también le advirtió a la juez, Sandra Liliana Heredia, que un eventual fallo condenatorio podría llevarla a incurrir en “falso raciocinio” o una “violación de las reglas de la lógica” al valorar de forma contradictoria las pruebas que presentó la Fiscalía durante el juicio oral.
Durante casi largos cinco meses, la defensa del exmandatario y la Fiscalía hicieron desfilar a 90 testigos, muchos de ellos delincuentes recluidos o condenados. La última palabra la tendrá el despacho de la juez de conocimiento.
Hasta ahora las cargas en el proceso han sido así: la Fiscalía pidió que el expresidente fuera declarado culpable, la bancada de las víctimas también. La Procuraduría pidió absolución y la defensa del expresidente –que intervendrá el próximo martes 1 de julio– también alegará por la inocencia de Uribe Vélez.
El juzgado tendrá hasta el próximo 8 de octubre para emitir un fallo: puede ser condenatorio o absolutorio, lo más probable es que la parte vencida en el juicio apele esa eventual decisión.