Cárcel ecuatoriana, una verdadera carnicería humana.


Por lo menos 31 reclusos perdieron la vida en un nuevo estallido de violencia carcelaria que se inició este sábado 23 de julio en Ecuador y se extendió hasta este día 25 de julio cuando militares y policías ingresaron a la penitenciaría del Litoral, Guayaquil para retomar el control, confirmaron las autoridades de ese país.

«Hasta el momento se confirma el fallecimiento de 18 privados de libertad, tras los enfrentamientos registrados desde el sábado en la Penitenciaría del Litoral, en Guayaquil. Además 11 personas (incluido un policía) resultaron heridas», señaló por parte la Fiscalía en la red social Twitter.

Previamente, el ministro del interior Juan Zapata, aseguró que hay “mal olor” por la descomposición de los cadáveres. Según información de la cartera de Estado, en el lugar se desplegaron 1.500 efectivos de la Policía Nacional y 1.200 uniformados de las Fuerzas Armadas.

De igual forma gobierno declaró el estado de excepción en todas las cárceles del país tras una serie de graves disturbios que han dejado al menos 31 muertos desde el sábado.

Bajo esta medida, que estará vigente por 60 días, efectivos de la policía y las fuerzas armadas en las cárceles tomaron el control en las prisiones para restablecer el orden en dichos lugares.

“Las fuerzas del orden toman el control de los centros de privación de la libertad”, tuiteó Juan Zapata, ministro del Interior de Ecuador.
La intervención de la fuerza pública ecuatoriana se registra tras una huelga de hambre en varias prisiones del país y una serie de incidentes con disparos y explosiones en la penitenciaría del Litoral.

Integrada en un complejo de prisiones al norte de Guayaquil, al Litoral es la cárcel más peligrosa del vecino país.

Comentarios en Facebook