Este es un hecho violento registrado el fin de semana en este departamento, cuyas comunidades están conmocionadas por este caso.
En la noche del domingo, un ataque armado cobró la vida de tres personas que se movilizaban en una cuatrimoto por la Ruta 45, a la altura del sector conocido como Palmito, en jurisdicción del municipio de Timaná.
De acuerdo con las primeras versiones, un sujeto armado interceptó a las víctimas y les disparó en repetidas oportunidades, causándoles la muerte en el lugar de los hechos.
Las personas fallecidas fueron identificadas como Blanca Cecilia Correa, Karol Jimena Torres Guzmán y Antonio Duque, todos residentes de la vereda Cabaña Venecia.
Karol Ximena Torres Guzmán tenía solo 16 años de edad. Era la hija mayor de Tito Torres, un padre que hoy, entre el dolor y la confusión, solo pide justicia a las autoridades colombianas. La adolescente, que era oriunda de la capital arrocera del Huila, residía hace ocho años en el municipio de Pitalito, junto a su mamá, Patricia Guzmán.
La jovencita, que fue una de las víctimas mortales de la masacre ocurrida el pasado fin de semana en jurisdicción del municipio de Timaná, era estudiante del grado 11 de la Institución Educativa Humberto Muñoz Ordoñez de Pitalito. Tenía muchos sueños e ilusiones por cumplir; entre sus planes se visualizaba como integrante de la Policía Nacional, aunque contemplaba la posibilidad de convertirse en arquitecta o veterinaria. Aún no tenía decidido su futuro, pero destacaba su entusiasmo por la vida.
“Ella era la mayor de mis hijos. Tengo dos, ella y un niño. Karol vivía con la mamá. Estaba estudiando, ya casi terminando… en el colegio Humberto Muñoz Ordoñez. Tenía sueños, pero no tenía nada definido. Primero quería ser policía, luego arquitecta, después veterinaria”, comentó el campoalegruno.
Se presume que se dirigían hacia su lugar de residencia cuando fueron emboscados.
Hasta el momento, las autoridades no han confirmado los móviles del crimen. Equipos de investigación judicial y criminalística ya hacen presencia en el sitio para adelantar las labores correspondientes.
Este triple homicidio ha generado consternación entre los habitantes de Timaná y Pitalito, que exigen mayor presencia estatal y resultados ante la creciente ola de violencia que golpea a la región.