Luego de la condena en primera instancia al expresidente Álvaro Uribe, sus hijos Tomás y Jerónimo se han mostrado muy activos en redes sociales en contra el senador de izquierda, a quien acusan de ser “heredero de las Farc”.
Durante la reciente condena en primera instancia contra el expresidente y jefe del Centro Democrático, Álvaro Uribe Vélez, por fraude procesal y soborno en actuación penal, el senador del Pacto Histórico Iván Cepeda salió al paso a las acusaciones que ha recibido por parte de los hijos del exmandatario, Tomás y Jerónimo Uribe.
De acuerdo con Cepeda, estos han emprendido una supuesta campaña en redes sociales en la cual lo acusan de ser “heredero de las Farc”. También los señaló de estar gestionando en Estados Unidos apoyos políticos para iniciar acciones judiciales en su contra.
En un mensaje publicado en su cuenta en la red social X, Cepeda declaró: “Hace un par de semanas, a raíz de la condena contra su padre por fraude procesal y soborno en actuación penal, los señores Tomás y Jerónimo Uribe emprendieron una campaña sucia a través de redes sociales en la que me acusan falsamente de ser heredero de las Farc. Incluso, están haciendo gestiones en Estados Unidos para buscar padrinos políticos que realicen acciones judiciales en mi contra en ese país”.
También el senador recordó que esta ofensiva coincide con las denuncias sobre presunta manipulación de testigos que, según afirma, seguiría realizando el abogado Diego Cadena, exdefensor de Álvaro Uribe.
“Cuando se produjo la condena en primera instancia del señor Álvaro Uribe señalé que estaba dispuesto a buscar un camino de diálogo sobre la justicia restaurativa. Pero veo que se sigue optando por el camino de la calumnia. No se aprende de las lecciones del pasado”, agregó Cepeda.
Finalmente, anunció que emprenderá acciones legales contra quienes, según él, han atacado su honra y su nombre: “Anuncio que estudiaré las acciones judiciales a que haya lugar ante las autoridades competentes. Son ellos quienes atacan y serán enfrentados como corresponde”.
La disputa pública entre Cepeda y los hijos de Álvaro Uribe evidencia la tensión política y judicial que rodea al exmandatario, quien enfrenta investigaciones y procesos judiciales tras su mandato presidencial, salpicado por los falsos positivos y otros delitos de lesa humanidad.
“Desde el día en que se produjo la decisión de la señora jueza (Sandra) Heredia, las amenazas se han vuelto casi que cotidianas”, afirmó Iván Cepeda en entrevista con varios medios de comunicación, describiendo el clima de hostilidad que enfrenta tras la condena de Uribe, que le impuso 12 años de prisión domiciliaria por soborno y fraude procesal.
Esta sentencia marca un hito en Colombia: Uribe, quien gobernó entre 2002 y 2010, es el primer expresidente condenado penalmente en el país por su participación en un hecho delictivo probado por la justicia colombiana.
Uribe Vélez, de 73 años de edad, cumple su condena en prisión domiciliaria, en este caso su lujosa finca en Río Negro, Antioquia. Su caso ha provocado un debate nacional intenso, con repercusiones en el Congreso y la opinión pública.
Incluso el presidente Gustavo Petro se ha pronunciado, calificando de “traidores de la patria” a congresistas que buscan apoyo internacional en Estados Unidos después de la decisión judicial.
El expresidente Álvaro Uribe Vélez agradeció a sus seguidores, a través de un video en redes sociales, las manifestaciones realizadas en su respaldo y donde algunos seguidores atacaron a los contradictores, como en la ciudad de Cali.
Las movilizaciones, que se desarrollaron en más de 28 ciudades de Colombia y en el exterior, reunieron a miles de personas que corearon consignas en defensa de su inocencia.
En Bogotá, la movilización partió del parque Nacional hacia la plaza de Bolívar, pese a la lluvia. Allí participaron congresistas del Centro Democrático, quienes denunciaron una “grave injusticia” y recordaron el atentado contra el senador Miguel Uribe Turbay. Medellín vivió una jornada pacífica con discursos, incluido el de Jerónimo Uribe, hijo del exmandatario.
En Cali, la “marcha de la Gallardía” incluyó recolección de firmas para precandidatos presidenciales, mientras que en Bucaramanga y Cartagena las concentraciones se realizaron sin incidentes.