La víctima, de 24 años de edad, permanece internada en una Unidad de Cuidados Intensivos, donde los médicos luchan por salvarle la vida al recibir 20 puñaladas.
Su expareja sentimental sería el principal responsable del brutal ataque que recibió Krisney Albani García Medina, una ciudadana de 24 años de edad, el pasado lunes 4 de agosto en Bucaramanga. Versiones preliminares indican que habría recibido al menos 20 puñaladas.
La víctima permanece recluida en la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Universitario de Santander (HUS), donde los médicos luchan por salvarle la vida. El último parte de los galenos establece que una de las heridas más delicadas es una lesión penetrante en el tórax, que al parecer habría comprometido uno de sus pulmones, dejándola en estado crítico.
Durante el ataque también resultó gravemente herida la madre de la víctima, Desire Coromoto Medina, de 51 años de edad, quien recibió nueve puñaladas. Sin embargo, se encuentra fuera de peligro y permanece en observación en el mismo centro asistencial.
El presunto agresor habría esperado que el padre de Krisney Albani García Medina saliera de la casa para, al parecer, sorprenderlas en estado de indefensión. Una vez solas, ingresó y desató un violento ataque con arma blanca.
El caso ocurrió este martes 5 de agosto, hacia las 5:40 a.m., en una vivienda ubicada en la carrera 4 con calle 16AN del barrio María Paz, al norte de Bucaramanga.
De acuerdo con versiones preliminares, el agresor habría sido pareja sentimental de Krisney Albani García Medina, de 24 años, y aunque terminaron hace un par de meses, él se habría quedado con un duplicado de las llaves de la casa.
El presunto agresor habría esperado que el padre de Krisney Albani García Medina saliera de la casa para, al parecer, sorprenderlas en estado de indefensión. Una vez solas, ingresó y desató un violento ataque con arma blanca.
Ella se las habría reclamado en varias ocasiones, pero él alegó que las había perdido. Así fue como logró ingresar al inmueble sin forzar cerraduras.
Una vez dentro, el hombre se dirigió hacia la habitación donde García Medina y su hijo, menor de edad dormían; allí la atacó brutalmente con un cuchillo. Su madre, Desire Coromoto Medina, de 51 años, al ver lo que sucedía, intentó intervenir, pero también fue apuñalada.