La candidata de Ucrania se convirtió en una espectacular «guerrera de la luz» en Miss Universo.


En la noche de ayer sábado 14 de enero se decidió quién era la merecedora de la corona de Miss Universo 2023 en Estados Unidos, pero ese aspecto quedó, por varios momentos, en segundo plano, todo gracias a Miss Ucrania.

Alicia Faubel, la española, disputó el trono de la belleza mundial en una velada mágica que dejó momentos para la historia dignos que recordar para siempre.

Es el caso de la representante de Ucrania que, en su última actuación, deslumbró convertida con su estilismo en una “guerrera de la luz”, homenajeando a su nación, hoy escenario de una guerra. 

Viktoria Apanasenko, de 29 años, es la representante del país invadido y es Embajadora de la Paz del Pacto Mundial de las Naciones Unidas en Ucrania.

Gracias a su posición y utilizando el certamen de belleza como altavoz al mundo, ha querido denunciar, a través de su estilismo el horror de la guerra en su país y defender a su compatriotas en este conflicto bélico.

De hecho, desde que comenzó el horror, la modelo está como voluntaria distribuyendo alimentos y medicinas a más de 500 familias ucranianas.

“El traje de ‘Guerrera de la Luz’ es una personificación de la fuerza interior de los ucranianos, nuestro coraje, determinación y amor por la libertad que fluye por nuestras venas. Al crear este traje, queríamos poner la idea de que la guerra no puede romper nuestras fuerzas y apenar nuestros corazones. Incluso resplandeciente, Ucrania renacerá como un ave fénix y brillará con brillantes rayos de bondad y fe”, expresó Viktoria Apanasenko en su perfil de Instagram, en el que cuenta con más de 230.000 seguidores.

Ella misma relató hace unos días en redes sociales que su viaje a Nueva Orleans no fue sido fácil. «Veinte horas sin dormir, partiendo de Ucrania rumbo al Miss Universo al son de bombardeos, explosiones, drones kamikazes y cohetes… ¡Pero llegué a Polonia!», expresó la representante de la belleza ucraniana. 

Apanasenko ha conseguido que su participación tenga mucha repercusión en todo el mundo, especialmente gracias a su traje regional que se ha vuelto viral en muy pocas horas. Para esta esta versión del concurso, Viktoria confió en la diseñadora ucraniana Lesia Patoka, fundadora de la marca Patoka, para realizar un vestido que era toda una declaración de intenciones.

Mientras que la participación de Miss Ucrania ha sido muy aplaudida, la de Miss Rusia ha estado en el punto de mira desde antes de iniciarse las fases preliminares del concurso. Tanto Viktoria Apanasenko como la rusa Anna Linnikova evitaron en todo momento posar juntas, muestra de que este certamen no escapa de la guerra fría que ahora vive el mundo.

«Necesitamos el apoyo de otros países para salvar la vida de nuestra gente y detener la crueldad de Rusia», manifestó miss ucraniana, mientras que la rusa evitaba pronunciarse sobre el conflicto bélico con un «mi actitud es lo más positiva posible».

 

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