Los senadores son integrantes de partidos como: Conservador, Mira, Centro Democrático, ASI y Colombia Justa Libres.


La reforma laboral del presidente Gustavo Petro, que está pendiente de ser discutida en tercer debate en la Comisión Séptima del Senado, sufrió este martes 11 de marzo un golpe mortal y todo se alcanzaría un total de ocho congresistas de ese componente legislativo que se inclinarían por apoyar el hundimiento de la iniciativa.

En efecto, las senadoras Lorena Ríos (Colombia Justa y Libres), Ana Paola Agudelo (Mira) y Berenice Bedoya (Alianza Social Independiente) se sumaron a los congresistas que promueven una ponencia negativa para que este polémico proyecto de la Casa de Nariño no avance más en el Capitolio.

“El proyecto, tal cual lo presentó el Gobierno, no genera nuevos empleos, sino que pone en riesgo los actuales”, fue uno de los argumentos de Bedoya, quien representa a la Alianza Social Independiente.

Mientras que la senadora Lorena Ríos indico que  “Es regresiva en el marco del Estado Social de Derecho, pues propicia la informalidad y el desempleo”.

En un sentido similar se expresó Agudelo para sumarse a este bloque que ahora mayoritaria que, entre otras cosas, dejaría sin margen de maniobra al oficialismo.

Con esta decisión, sumados a otros que ya han anunciado que votarán de forma negativa –como las senadoras del Partido Conservador Nadia Blel y Esperanza Andrade, el liberal Miguel Ángel Pinto y los opositores del Centro Democrático Alirio Barrera y Honorio Enríquez– ya habría ocho votos en contra.

La Comisión Séptima de Senado está conformada por 14 legisladores, por lo que para hundir y aprobar la reforma laboral (y cualquier otro proyecto) se requiere de un mínimo de 8 votos. Bajo esa radiografía, la oposición al proyecto ya puede inclinar la balanza hacia sus intereses mezquinos.

Este anuncio también podría impactar en la reforma a la salud, la cual igualmente está pendiente de tercer debate en esta misma comisión y que, al igual que la laboral, ha generado una dura polémica en todos los sectores políticos.

De hecho, esta iniciativa tiene ponencia positiva promovida por el Ejecutivo, otra alternativa que aún no tiene respaldo y la negativa que se radicaría este mismo martes 11 de marzo.

En todo caso, el ministro del Interior, Armando Benedetti, se encuentra dialogando con todos los sectores intentando revertir este tipo de decisiones y que las reformas del presidente Petro tomen un nuevo aire en el Congreso. En esto lo respalda el ministro de Trabajo, Antonio Sanguino, quien está a cargo de esta iniciativa y llegó en la mañana de este martes al Congreso intentado voltear las cargas.

Y, ante todo este panorama, el presidente Petro lanzó un mensaje que fue leído en clave de amenaza por no poder lograr mayorías que apoyen sus iniciativas en el Capitolio.

“Si la Comisión VII hunde las reformas que necesitan los trabajadores y el pueblo de Colombia habrá una ruptura entre el Congreso y el Gobierno. Espero que no cometan tamaña irresponsabilidad con Colombia”, dijo el jefe de Estado.

Si la comisión VII hunde las reformas que necesitan los trabajadores y el pueblo de Colombia habrá una ruptura entre el Congreso y el gobierno. Espero que no cometan tamaña irresponsabilidad con Colombia.

Eso sí, en paralelo y en el edificio nuevo del Congreso, este mismo martes se estaban registrando manifestaciones que pedían darle un impulso a la reforma laboral.

Se sabe que estas personas ingresaron a esta instancia legislativa con autorización de los congresistas del Pacto Histórico que rodean al presidente Petro, quien aún pelea por alcanzar las transformaciones sociales para mejorar las condiciones de vida de todo un país.

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