Desde el corregimiento de Valencia de Jesús, en la zona rural de Valledupar, la familia del soldado profesional Víctor Yepes García hizo un llamado desesperado para que se garantice su liberación.
Es inconcebible que, en pleno siglo XXI, la vida de un ser humano sea vulnerada de esta manera. La familia y amigos de Víctor Hugo Yepes García, un joven soldado profesional que solo aspira a construir un futuro mejor para sí mismo y su familia, han alzado sus voces, clamando con fervor a las disidencias de las Farc para que permitan su regreso a casa.
¿Cómo es posible que estos grupos armados sigan operando con total impunidad, afectando la vida de personas inocentes?
“Le pedimos a los captores que respeten la vida de Víctor Hugo. Es un niño, está comenzando a vivir”, afirmaron los seres queridos del soldado durante una emotiva velatón.
Estas palabras resuenan no solo como un llamado de auxilio, sino como un grito desgarrador de una comunidad que anhela paz y justicia. La familia de Víctor Hugo, como tantas otras, merece la oportunidad de ver a su hijo, hermano y amigo regresar sano y salvo, sobre todo cuando este joven se unió al Ejército con el único objetivo de ayudar a su familia y hacer realidad sus sueños.
El ataque perpetrado el pasado 14 de noviembre en la zona limítrofe de los municipios de Balboa y El Patía, fue un acto de barbarie que evidencia la fragilidad de la seguridad en esta región del suroccidente del Cauca.
Desde el corregimiento de Valencia de Jesús, en la zona rural de Valledupar, la familia del soldado profesional Víctor Yepes García hizo un llamado desesperado para que se garantice su liberación.
El militar fue secuestrado el pasado 14 de noviembre en Balboa, Cauca.
Sus… pic.twitter.com/RmxdplnL1a— Hoy|Noticias (@HoyNoticias2) November 17, 2025
Las imágenes del momento en que Víctor Hugo, rendido y sin opciones, cae en manos de los disidentes son un recordatorio de la violencia que sigue presente en nuestro país. ¿Cuántos más tendrán que enfrentar situaciones similares? ¿Hasta cuándo permitiremos que grupos alzados en armas jueguen con la vida de nuestros jóvenes?
Es absolutamente indignante que, en lugar de celebrar el valor y el sacrificio de un joven que decidió servir a su país, estemos condenándolo a un sufrimiento inimaginable.
La vida de Víctor Hugo tiene un valor inmenso, y su sueño de triunfar debe ser respaldado por todos nosotros. Es hora de que la sociedad, la comunidad y las autoridades se unan en un solo clamor: ¡Libertad para Víctor Hugo Yepes García! Su regreso no solo significaría una victoria personal, sino un paso hacia la construcción de un futuro donde la violencia no tenga cabida.

