¡Se les cayó la estantería! Recobros indebidos y sobrecostos en medicamentos, la olla podrida del sistema de salud colombiano.
Las modalidades más frecuentes de robarse los recursos de la salud en Colombia son los recobros indebidos, la indebida formulación y los sobrecostos en medicamentos, denunció la Contraloría General de la Nación.
Otra modalidad que está a la par es la intermediación indebida de los recursos, a terceros que no están habilitados por la ley, de la UPC, con el traslado de funciones que están directa y exclusivamente a cargo de las EPS, y claro, no puede faltar la sustracción y aprovechamiento de los recursos, desviados con el objeto de acrecentar el patrimonio particular.
Y es que a Colombia la pandemia por el Covid 19 no es la única que sacó a flote la crisis del sistema de salud, el otro virus, enquistado en los políticos y funcionarios, la corrupción tiene en cuidados intensivos la salud de todo el país. “Nuestro propósito principal es hacer una revisión de los recursos públicos que reciben las EPS, que hoy tenemos un presupuesto aproximado de 54 billones de pesos”, resaltó Lina María Aldana, Contralora Delegada para el Sector Salud.
Crisis que se extendió a todo el territorio con la misma velocidad del virus para acabar de destapar las graves irregularidades del sistema de salud. “Esto definitivamente los está alejando de integrarse a un sistema mucho más humano y más cercano a la gente”, añadió Aldana, Contralora Delegada Para el Sector Salud.
De igual modo, en la Contraloría General de la República se adelantan actuaciones para verificar si, a pesar de los reiterados pronunciamientos que ha hecho sobre la indebida destinación y aprovechamiento de los recursos, algunas EPS en la actualidad han incurrido presuntamente en:
La erogación de gastos de administración dentro de la franja de la UPC, por productos o servicios que no se prestaron o no se utilizaron.
Pagos de anticipos por servicios de salud que no se prestaron.
Omisión de la gestión de cobro de cartera dentro de procesos liquidatorios en desmedro de los recursos parafiscales.
Pago de créditos que no tienen relación de conexidad con la prestación de los servicios a los usuarios.
Adquisición de equipos e inmobiliario no relacionados con dicha prestación.
Y pago de transporte de personal administrativo.