¡Tragedia ambiental! Fallecieron 51 ballenas piloto tras quedarse varadas en playa del suroeste de Australia.


Este miércoles 26 de julio se confirmó una devastadora noticia en el mundo animal:más de 50 ballenas murieron, luego de quedarse varadas en una playa.

Las fotografías y vídeos que circulan en las redes sociales conmocionaron a más de uno. Además, porque las autoridades intentaron salvar a estos mamíferos, pero no se pudo hacer nada.

Eran unas ballenas piloto o más conocidas como calderones, que se vararon a 400 kilómetros al suroreste de Perth, una ciudad de Australia.

Hay que destacar que estos ejemplares hacían parte de un grupo de misticetos que se encontraban en aquel lugar. Por lo cual, las autoridades están haciendo todo lo posible para que las demás ballenas, que son 46, puedan sobrevivir.

La meta es que estos animales puedan ir a las aguas profundas durante el día. Por su parte, el portavoz del departamento de Biodiversidad y Medio Ambiente dijo que «las ballenas están viniendo a la orilla».

Asimismo, dijo que «la seguridad de la gente y de las ballenas son nuestra prioridad, por lo que instamos a la gente a no acercarse a la playa». Hay que destacar que, este hecho suele suceder de vez en cuando, tanto en Australia como en Nueva Zelanda.

Por eso hay que recordar que en octubre de 2022 ocurrió lo mismo, pero en aquella ocasión fueron 500 mamíferos piloto. Ellas se quedaron varadas en Islas Chatham.

Pero estas tareas afrontan una serie de peligros por la existencia de «ballenas grandes, angustiadas y potencialmente enfermas, tiburones, olas, maquinaria pesada y embarcaciones», explicó el organismo regional.

En el mes de septiembre de 2022, murieron la mayoría de las 230 ballenas pilotos que se quedaron varadas en una remota isla de la región australiana de Tasmania, que al igual que la playa Cheynes, están en las rutas migratorias de diversas especies de cetáceos.

Ese varamiento en Tasmania se produjo dos años después de que unas 470 ballenas piloto se quedaran varadas en ese mismo lugar, de las cuales solo un centenar pudieron ser rescatadas y llevadas a altamar.

Australia, al igual que el vecino país de Nueva Zelanda, es escenario de frecuentes varamientos de ballenas y otros mamíferos marinos, sin que los expertos hayan logrado esclarecer con precisión los motivos.

No obstante se cree que pueden estar vinculados a enfermedades, errores de navegación, cambios repentinos en las mareas, la persecución de depredadores o a condiciones meteorológicas extremas

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