17 buses del MIO vandalizados este fin de semana


Durante este fin de semana, el Sistema de Transporte Masivo MIO de Cali, sufrió un nuevo ataque de vandalismo.

La fatídica jornada  se registró entre el viernes 13 de agosto y el domingo 15 , dejando un balance de un conductor lesionado, 17 vehículos fuera de servicio y millonarias pérdidas.

Estos ataques comenzaron el pasado viernes 13 de agosto sobre las 10 de la mañana en el barrio Flora Industrial, cuando un habitante de calle dañó el retrovisor izquierdo del bus MC22048 que realizaba la ruta T31.

Pasado el mediodía un motociclista, presuntamente transportador irregular, se atravesó al paso del bus MC12087 y, usando su casco, destruyó el retrovisor izquierdo del vehículo y amenazó también al conductor.

Voceros de los operadores señalaron que no  hubo usuarios lesionados o víctimas mortales, a pesar de que los ataques se perpetraron, incluso, cuando los buses prestaban el servicio al público. 

De igual forman confirmaron que la  mayor arremetida contra los buses del MIO se dio mismo viernes, entre las 7:20
y 9:30 de la noche, cuando otros 9 vehículos del Masivo fueron atacados con piedras y palos en cercanías a la terminal Andrés Sanín, así como en otros sectores donde el vandalismo contra el Masivo se ha convertido en algo habitual como son:

Las carreras 23, 25, 28D, 39 y 99, al igual que las calles 42, 54, 70 y 74, en el sur y oriente de Cali.

El hecho más lamentable, porque causó lesiones a uno de los conductores, ocurrió el sábado 14 de agosto a eso de las tres de la tarde, cuando un motociclista que invadió el carril exclusivo del MIO arrojó un ladrillo, atentando contra la vida del conductor y los pasajeros.

El ataque dejó rotos  los vidrios del lado izquierdo del vehículo. El conductor resultó herido en su cabeza y brazo izquierdo, debiendo recibir atención médica.

Las Empresas Operadoras de Transporte y Recaudo del MIO reiteran su rechazo a la violencia continuada contra el Masivo y hacen un llamado urgente  a Metro Cali, la Alcaldía de Cali y la Policía para que, ejerciendo sus funciones constitucionales, protejan el patrimonio de los caleños y garanticen la prestación de este servicio público esencial.

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