Las autoridades adelantan las investigaciones para identificar con las cámaras de seguridad a los responsables de los desmanes en el estadio y sus alrededores.
Algunos hinchas violentos y salvajes empañaron la noche de futbol en el estadio Pascual Guerrero de Cali, quienes, al notar que el compromiso iba a terminar y que el cuadro ‘escarlata’ no pudo remontar en la final, decidieron atacar a la fuerza pública, queriendo ingresar al terreno de juego.
La situación de orden público se ‘calentó’, al punto que los jugadores de Atlético Nacional tuvieron que ser evacuados del escenario deportivo dentro de una tanqueta de la Policía.
En videos, publicados por los mismos jugadores ‘verdolagas’ se ven cómo varios deportistas van en una pequeña tanqueta rumbo al terminal aéreo de la ciudad de Palmira, que le brinda el servicio a la capital del Valle del Cauca.
En las imágenes se aprecian a los jugadores celebrando con cánticos y con el trofeo de la Copa Betplay.
Y cómo lo entró? Guardado en el canguro? @PoliciaCali @alejoeder @SeguridadCali @PadreHuerfano1 @HoyNoticias2 pic.twitter.com/WQGrFwv5Yh
— mapiaguilars (@mapias15) December 16, 2024
En varios videos que se han viralizado en redes sociales, y que son materia de investigación por las autoridades, se observa como uno de los hinchas usa un artefacto similar a un arma, pero que dispara fuegos artificiales, el cual apunta hacia la fuerza pública y comienza a lanzar los peligrosos elementos pirotécnicos.
En las impactantes imágenes se ve como el dispositivo dispara varios ‘voladores’ de pólvora en pocos segundos. Estos elementos alcanzaron a los miembros del antiguo Esmad, que trataban de contener, en la pista atlética, a los hinchas furibundos que querían ingresar a la cancha.
En redes sociales han cuestionado los controles de seguridad implementados en el escenario deportivo, debido a que se trataba de un partido de alto riesgo y se preguntan cómo dejaron ingresar elementos de alto potencial de peligrosidad.
Por último, cabe recordar que la alcaldía de Cali anunció que se está ofreciendo una recompensa de hasta $30 millones de pesos para quienes den información que permita la captura de los responsables de los desmanes.
