¡Mandaron a estudiar a la senadora uribista María Fernanda Cabal!.


El senador por el Pacto Histórico Wilson Arias salió victorioso en medio de una denuncia que le interpuso la también senadora María Fernanda Cabal, del Centro Democrático, ante la Corte Suprema de Justicia.

La Sala de Instrucción del alto tribunal resolvió que no había “relevancia” en las pretensiones de la congresista uribista.

El ‘encontronazo’ judicial inició porque a inicios de abril de este año, Arias hizo una publicación en su cuenta de Twitter en la que escribió “Internacionalismo facho” y adjuntó la foto de Cabal donde tiene puesto un tapabocas del expresidente estadounidense Donald Trump.

Ese trino se hizo viral en las redes sociales y llegó a los ojos de la legisladora opositora, quien llevó el tema a instancias legales por presunta injuria, calumnia y hostigamiento.

Tras el análisis de la denuncia, la Corte Suprema anunció que inadmitía la denuncia debido a que tenía “irrelevancia jurídico-penal de la conducta”. Es decir, el trino del congresista del Pacto Histórico no contemplaba los delitos que le endilgó la también esposa del director de la Federación Nacional de Ganaderos (Fedegán), José Félix Lafaurie.

Los magistrados de la Sala de Instrucción determinaron, entonces, que la publicación de Arias era una mera opinión política que no afectaba ni la idoneidad ni la integridad física de María Fernanda Cabal; hoy muy criticada por sus posturas radicales frente a temas como democracia y libertades civiles.

Además, los togados explicaron que, desde su concepto, esa publicación tampoco incidía de manera negativa en la honra y buen nombre de la senadora uribista, era una simple opinión frente a lo que representa Cabal en la vida política del país.

Para sustentar el fallo contra Cabal, el alto tribunal le recordó que los servidores estatales se enfrentan, a diario, a ese tipo de comentarios y que, aunque puedan generar malestar en quienes los protagonizan, la Sala de Instrucción exhortó a tener mayor tolerancia a esas publicaciones.

Y fueron más allá: los magistrados determinaron que el comentario de Wilson Arias, quien milita en la coalición progresista con la que el presidente Gustavo Petro llegó al poder en julio del 2022, no incitaba a la violencia dado que era “muy genérica y abstracta”.

Por ahora, la militante del partido que naturalmente dirige el investigado ex presidente Álvaro Uribe Vélez no se ha pronunciado luego de este traspié judicial. Sin embargo, el que sí lo hizo fue el mismo Arias, quien se despachó contra su demandante y celebró el espaldarazo que la Corte.

“Señora María Fernanda Cabal no siga queriendo dar cátedra sobre fascismo, nazismo o socialismo”, aseveró el legislador del Pacto Histórico quien, en tono irónico, mandó a estudiar a su colega en el Congreso de la República.

“Usted me demandó porque dije “internacionalismo facho” y un juez acaba de inadmitir su demanda “por falta de relevancia”. De nuevo: estudie por favor un poco más”, agregó Wilson Arias.

Este nuevo agarrón entre los dos congresistas, de orillas políticas completamente alejadas, se une a varios de los encontrones que han protagonizado desde que se instaló la actual legislatura. Por ejemplo, hace unos meses y en plena discusión de la creación del Ministerio de la Igualdad, se hicieron duros señalamientos durante un debate en el Senado.

La congresista uribista fue de las principales críticas de que se creara esa cartera que estará a cargo de la vicepresidenta Francia Márquez y por eso arremetió contra Wilson Arias, que era ponente del proyecto que, finalmente, vio la luz en el Legislativo.

Arias, por su parte, se defendió: “La ultraderecha nos acusa de ser amigos de los bandidos. Los terratenientes vienen a ratificar su derecho oficial de que todos somos iguales, pero hay unos que son más iguales que otros. Los terratenientes históricos regañándonos porque no hemos vendido un chicle. Soy hijo del peluquero a mucho honor y vendí chicles. Tengo la misma credencial que los hijos de los terratenientes”, dijo el senador.

Cabal pidió la palabra e, igualmente, le hizo vehementes reparos a su colega en el recinto del Senado y hasta lo sindicó, a grito herido, de ser hostigador de las mujeres en la política. Eso sí, dijo no prestarle mayor cuidado a lo que hacía el congresista del Pacto Histórico y explicó por qué respaldaba a los azucareros vallecaucanos.

Comentarios en Facebook