La aprehensión se dio luego que Fiscalía lograra que un juez penal militar ordenara este procedimiento judicial.
Un mayor de la Policía Nacional fue capturado por exigir pago a sus subalternos a cambio de otorgar permisos.
La aprehensión se dio gracias a una investigación adelantada por la Fiscalía General de la Nación, la cual permitió establecer que el uniformado, en complicidad de su conductor, cometió las irregularidades en mención.
Se trata del comandante de la estación de Policía de El Poblado, en Medellín. El conductor es un subintendente de la institución.
Las investigaciones adelantadas por la Fiscalía permitieron establecer que el comandante de la Policía, en octubre de 2024, exigió pagos a otros uniformados a su cargo para autorizarles permisos. Las exigencias económicas eran materializadas a través de la billetera digital Nequi.
Asimismo, las autoridades aseguraron que los pagos no llegaban al número del comandante de la estación de El Poblado, sino al de su conductor, un subintendente que también fue capturado en medio de un operativo judicial.
Con suficiente material de prueba, el ente acusador solicitó al juez penal militar a cargo del caso una orden de captura en contra de los uniformados.
El togado accedió a la solicitud de la Fiscalía y la captura se llevó a cabo por los mismos efectivos de la Policía Nacional en Medellín. El comandante y su conductor quedaron a disposición de las autoridades pertinentes para realizar el debido proceso en el caso por presunta responsabilidad en el delito de concusión.
“Por estas razones el juez 1724 Penal Militar y Policial de control de garantías accedió a la pretensión, misma que fue materializada el día de hoy. Los capturados serán dejados a disposición del Juez Penal Militar y Policial competente para continuar con el proceso”, indicó la Policía, citada por medio de la capital de Antioquia.
En un caso similar dos policías de Medellín fueron capturados y quedaron bajo orden de arresto en su lugar de residencia por el delito de concusión.
De acuerdo con información revelada por la Fiscalía General de la Nación, los uniformados exigieron una millonaria suma a la propietaria de un SPA a cambio de no judicializarla por homicidio culposo.
Los patrulleros José Yoiber Echeverri Villa y Diego Fernando Cordero le aseguraron a la ciudadana que una de sus empleadas estaba involucrada en la muerte de una persona por un procedimiento que, supuestamente, se hizo en su SPA.
Así mismo, le dijeron que por ser empleada suya, ella también tenía que responder por el delito de homicidio. Con el objetivo de supuestamente no judicializarla, le pidieron 15 millones de pesos.
“La investigación, adelantada por un fiscal de la Unidad de Delitos contra la Administración Pública de la Seccional Medellín, evidenció que el pasado 5 de septiembre los ahora procesados le habrían exigido a la propietaria de un SPA ubicado en el barrio Manrique de la capital antioqueña, el pago de 15 millones de pesos, so pena de judicializar por homicidio culposo”, dice el comunicado del ente acusador.
Ante el temor de ir a la cárcel, la mujer logró juntar y entregar ocho millones de pesos a los uniformados. El valor restante, de acuerdo con la investigación, fue canjeado por un procedimiento estético para la esposa de uno de los policías.