Ministerio del Trabajo envía dura advertencia a Rappi.


«Con la violencia no van a cambiar el país, lo que necesitamos es que haya diálogos responsables y llamo al CEO de Rappi para que, efectivamente en una mesa técnica que tienen con el Ministerio del Trabajo, continuemos dialogando. Nos hemos reunido muchas veces o acabamos esa mesa y nos vamos como ellos quieren, a las calles. Pero una empresa que tiene un capital de más de mil millones de dólares… me parece injusto que no tenga cómo darles garantías a sus trabajadoras y trabajadores».

Así lo afirmó la Ministra del Trabajo, Gloria Inés Ramírez, al término de un encuentro de socialización en la Comisión Séptima de la Cámara de Representantes para discutir los puntos más relevantes del proyecto de ley de reforma laboral «Trabajo por el Cambio».

La titular de la cartera laboral solicitó a la Unidad de Gestión Pensional y Parafiscales (UGPP) información para verificar si la empresa de negocio de domicilios cumple con los requisitos como independientes:

«Como son independientes, lo que voy es a corroborar que lo son [sic]. En Colombia todo trabajador independiente tiene que llenar una Planilla Integrada de Liquidación de Aportes (PILA) y el que lo contrata tiene que suministrar la cuenta de la planilla y vemos si es verdad que se está cumpliendo. Créanme que nosotros procederemos como debe ser en términos generales», puntualizó Ramírez al concluir la jornada de socialización del proyecto de la reforma laboral que tiene como objetivo una estabilidad laboral para todas las personas trabajadoras del país.

Dicha reforma, presentada ante el Congreso de la República el pasado 16 de marzo, contiene principios del derecho para que haya igualdad de oportunidades para los y las trabajadoras, remuneración mínima, estabilidad del empleo, garantía a la seguridad social, descanso necesario, libertad de asociación, entre otros.

Es de anotar que luego de conocerse el documento de la reforma laboral, los trabajadores de Rappi ―más conocidos como Rappitenderos o domiciliarios― representan uno de los sectores que más se ha pronunciado en contra de la misma, pues asegura que con el cambio de los contratos laborales se vería perjudicado. Uno de los argumentos principales de los trabajadores de la plataforma es que ya no tendrían la independencia que les ofrece la empresa y que no están «interesados» en ser contratados directamente por ella.

Sin embargo, llama la atención que el 3 de marzo de 2022 un grupo de Rappitenderos protestó frente a las oficinas del Ministerio de Trabajo y de la plataforma Rappi en el norte de Bogotá, exigiendo garantías para la labor que desarrollan y mejores condiciones.

Hace un año y 27 días los domiciliarios de esta plataforma salieron a las calles con pancartas que mostraban mensajes tales como «Los repartidores son trabajadores».

«Si yo soy socio quiero lo que me corresponde de esa oficina. No soy su socio porque no tengo nada allí. De repente nos llaman colaboradores, buscan una y otra palabra para evadir la ley», señaló uno de los voceros de Unidapp, la agremiación que reúne a trabajadores de plataformas y que en dicho momento convocó las manifestaciones.

En 2022, los Rappitenderos exigían el pago de la tarifa plena de domicilio porque consideraban que les correspondía en su totalidad. Según ellos, la plataforma lo informó a través de un video. Además, denuncian que las propinas no son entregadas a quienes llevan los domicilios.

En ese momento, los domiciliarios decían en redes sociales y medios de comunicación, como RCN Radio, que la empresa los trataba como esclavos: «En ocasiones recibimos hasta un 23% del valor del domicilio, que serían entre 1.000 y 3.000 pesos. A la par, la empresa Rappi patrocina vehículos en la Fórmula 1. Rappi hace riqueza esclavizando a sus trabajadores».

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