Otro escándalo de corrupción: ésta vez en la División de Fuerzas especiales. Los Kepis se pudren


Un posible nuevo caso de corrupción en el ejército prende las alarmas en el país. Un grupo de siete uniformados  fueron los encargados de señalar al  comandante de la División de Fuerzas Especiales, el mayor general, Jorge Eduardo Mora López.

Según los militares el general, quien es hermano del general Jorge Enrique Mora Rangel y quien hoy suena como próximo comandante del Ejército Nacional para reemplazar al general Eduardo Zapateiro, estaría haciendo solicitud ilícita de dineros por cuenta de supuestos viáticos para su beneficio, así lo dio a conocer la emisora WRadio 

Ante las denuncias de los militares  el ejército,  a través del proceso de gestión de inspección (control interno institucional), detectó  a principios del mes de septiembre  que en la División de Fuerzas Especiales existirían  posibles irregularidades en la solicitud y cancelación de una partida especial de viáticos y pasajes; por lo tanto ya se inició una indagación disciplinaria

La denuncia hacia el general Mora esta relacionada con las órdenes dadas  a sus subordinados para que manejaran un gasto especial de viaje, por el equivalente entre 8 y 10 millones de pesos mensuales. De esta forma, pedía que se lo enviaran a través de cuentas bancarias por medio de un capitán y varios suboficiales, o en otros casos, la orden era entregarle  él dichos montos  en efectivo.

Según la denuncia, esto lo habría hecho durante siete meses y habría utilizado a dos ayudantes, identificados como el capitán Martín Alonso Garcés Forero y el sargento Omar Augusto Osorio Tasco.

Así mismo se conoció que habría un documento en el que se acusa al general Mora López de supuestamente impartir órdenes para que le entregaran mensualmente 5 millones de pesos de las partidas de viáticos.

La denuncia señala que “desde la llegada del brigadier Jorge Mora López como comandante de la División de Fuerzas Especiales, la instrucción y orden al señor teniente coronel Luis Eduardo Gallego Villanueva, ha sido gestionar una partida especial o urgencia funcional de viáticos por un valor de 5 millones de pesos para cancelarle a él ese valor de manera mensual”, detalla el documento obtenido por ese medio.

El alto oficial que dirige las tropas que están detrás de los grandes cabecillas de los grupos armados en Colombia  se defendió argumentando que :  él sería la víctima de todo este entramado, pues uno de sus subalternos, el capitán Jaime Mauricio Cendales, habría cobrado durante más de nueve meses estos dineros a nombre suyo, sin su consentimiento. Además, habría involucrado a 15 uniformados a través de sus cuentas bancarias.

Los «quepis» se pudren en el canasto de las manzanas… 

Comentarios en Facebook