Procuraduría destituye e inhabilita por 12 años a Eduardo Pulgar Daza
Por intento de soborno, la Procuraduría General de l Nación destituyó,inhabilito y sancionó al exsenador Eduardo Enrique Pulgar Daza
La inhabilidad impuesta al excongresista por ofrecer $200 millones al entonces juez promiscuo municipal de Usiacurí (Atlántico), Andrés Fernando Rodríguez Caez, a cambio de favorecer a Luis Fernando Acosta Osío, miembro de la Junta Directiva de la Universidad Metropolitana de Barranquilla, en un proceso judicial es de 12 años
De acuerdo con las pruebas recaudadas por la Procuraduría «el senador después de exponer el contexto del conflicto entre los directivos de la Universidad Metropolitana, le solicitó al entonces juez de Usiacurí que lo ayudara con ese asunto porque esa universidad le ponía unos voticos importantes y señaló que, algunos directivos de ese centro educativo le apoyaban en sus campañas políticas para ser congresista».
Para la Procuraduría, el exsenador Pulgar utilizó su cargo para que el exalcalde de Usiacurí, Ronald Padilla convenciera al juez Rodríguez Caez de reunirse con él y así poder hacer el ofrecimiento de favorecer a Acosta Ossio, “abusando del cargo afectó seriamente los principios de la función pública” aseguró la Procuraduría.
La declaración del juez Rodríguez Caez se sustentó con las grabaciones que aportó, en las que se registran conversaciones en las que intervino como víctima y que comprometen a Pulgar Daza.
Importante resaltar que la defensa del exsenador trató de invalidar estos audios, que fueron claves para la investigación, argumentando que los entregó tiempo después de los hechos ; ante esto el ente disciplinario aseguró que el Juez Rodríguez Caez, presentó los audios a destiempo, tres años después, porque tenía miedo y se sentía intimidado, por lo que los guardó en una copia hasta que decidió presentarlos a la justicia.
Según el fallo disciplinario, el exsenador abusó de su cargo al ofrecer una utilidad en dinero a un juez de la República, con el firme propósito de que este «actuara a favor de los Acosta, miembros de la Junta Directiva de la Universidad Metropolitana y, de contera, para beneficio del disciplinado, porque los Acosta, según lo admitió el procesado, le daban dinero para financiar su campaña electoral al Congreso, además, le ayudaban con puestos y con becas».
La conclusión de la Procuraduría es que el entonces senador Eduardo Pulgar, propuso al juez un trato lucrativo, es decir darle dinero, sobornarlo, a cambio de que el funcionario incumpliera y quebrantara su deber de imparcialidad y eficiencia como autoridad judicial.
La conducta, descrita en la ley penal como el delito de cohecho, fue calificada por la Procuraduría como falta disciplinaria gravísima cometida a título de dolo
Es de anotar que la decisión no fue apelada por la defensa y, en consecuencia, el fallo disciplinario proferido por la Sala Disciplinaria de Juzgamiento de Servidores Públicos de Elección Popular quedó en firme.
De otra parte hay que tener en cuenta que el excongresista ya fue condenado a 4 años y 10 meses de prisión por la Corte Suprema de Justicia por los delitos de tráfico de influencias y cohecho.
