¿Servicio de aseo en la casa del Fiscal Barbosa a costillas de los colombianos?


Otro escándalo, uno más, envuelve al Fiscal General de la Nación Francisco Barbosa que al parecer  resultó más «duquezuelo» que el presidente que desfilaba en alfombra roja mientras los ciudadanos tenían el agua al cuello.

A las denuncias de utilizar a la fiscalía para su trasteo personal y coger una de las sedes como guardamaletas, asignar funcionarios  del CTI como paseadores para sus perros, avión para pasear con la familia, se suma ahora el escándalo por utilizar personal de servicios generales de la entidad  para su casa; todo pagado con los recursos públicos, es decir  a costillas de los colombianos.  

Francisco Barbosa y su esposa Walfa Téllez,  ( que no se sabe que pasó con la investigación en su contra en la misma entidad) de acuerdo con la denuncia de la Revista Cambio, han utilizado  como empleadas de servicio doméstico en su lugar de residencia a funcionarias de una empresa contratista de la Fiscalía, que aparecen “asignadas en la casa del fiscal” y son pagadas con dineros públicos. 

De acuerdo con la investigación revelada por Cambio y con abogados consultados, ninguna norma faculta al fiscal para usar contratistas pagadas con dineros públicos como servidoras a su familia.

Para asegurar esto el medio de comunicación consultó a cuatro exfiscales y todos coincidieron que ésta, es una situación “exótica” que no se presentó en sus respectivas administraciones. 

La respuesta de la  Fiscalía a través de Twitter es que  “la prestación del servicio de aseo y cafetería no incluyen en ningún caso la prestación del servicio en la residencia del señor Fiscal General de la Nación y por tanto, esta supervisión no ha autorizado ningún pago con recursos públicos con este concepto” , y aseguran que las trabajadoras quizás hayan decidido trabajar en la residencia del fiscal “por su cuenta”.

Luego de estas revelaciones, la Fiscalía emitió un comunicado oficial asegurando que no se contrató ni pagó con recursos públicos ningún bien para uso personal de Francisco Barbosa, incluyendo ningún servicio de aseo para su familia, agregaron que la información es falsa y que atenta contra el buen nombre del funcionario. 

Así las cosas, el director de la revista Cambio, Daniel Coronell, contestó las declaraciones realizadas por la Fiscalía a raíz de la investigación y aseguró que  “en unos minutos @estoescambio publicará los documentos que sustentan la investigación y desmienten comunicado de la @FiscaliaCol”. 

A pesar de la escueta respuesta , Cambio presentó el  documento que prueba que al menos dos operarias de aseo y cafetería fueron asignadas a la casa del fiscal, y ambas son remuneradas por la empresa contratista a su vez pagada por la Fiscalía, es decir , por los colombianos. 

Cambio a través de sus  redes sociales  publicaron varios de los soportes que desmienten la versión entregada por la Fiscalía en un comunicado, en una de las imágenes se muestra un listado llamado «personal de despacho 2022», allí se relacionan 8 personas con el rubro de «cafetería», dos de ellas, Dora Priscila Muñoz Parra y Sara Inés Segura Ortega ,aparecen con la ubicación «casa».

Entre tanto, las mujeres que se han desempeñado en labores domésticas en la casa de fiscal, se han quejado del número de horas que tienen que trabajar y señalan que la esposa del fiscal, Walfa Téllez, hacía sentir su poder cotidianamente aunque no fuera funcionaria de la Fiscalía, ella les daba órdenes y a veces las hacía quedarse hasta altas horas de la noche. 

“Al principio, Walfa parecía una funcionaria más porque iba y daba órdenes”. También denunciaban la manera despectiva de relacionarse con ellas “a veces, cuando Walfa estaba en el búnker y la atendían las otras empleadas de la entidad, les decía ‘ay, niñita, eso se sirve es por la derecha’, ni siquiera se tomaba lo que le pasaban, lo dejaba ahí y empezaba a regañar a las peladas y las miraba de arriba hacia abajo” según fue documentado por el medio digital. 

De otra parte , en conversaciones de WhatsApp, se evidencia que la contratista de servicios generales de la Fiscalía tiene que trabajar desde la casa del fiscal y se queja de la hora en la que la recogen. El WhatsApp tiene hora 9:26 pm, es decir que la empleada estaba a punto de cumplir las 18 horas de trabajo.

En otro mensaje se ve cuando se queja por la hora en la que es recogida y asegura que «yo salgo muy tarde del apartamento y hasta ahora voy para la casa», el WhatsApp tiene hora 9:26 pm, es decir que la empleada estaba a punto de cumplir las 18 horas de trabajo.

Este no es el primer escándalo en el que se ven inmiscuidos el fiscal y su cónyuge, recordemos que hace algunos meses este mismo medio de comunicación denunció que Walfa Téllez hacía uso del gimnasio de la Fiscalía y no lo compartía con nadie. 

¿A este paso , los colombianos estarán pagando también los regalos de navidad de la familia «real» del fiscal?

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