Tensión entre el gobierno nacional y las disidencias de las Farc por operativos militares en el país.


El Gobierno del presidente Gustavo Petro sigue adelante con la instalación de una mesa de negociación con las disidencias de las Farc de Iván Mordisco en Tibú, Norte de Santander, el próximo domingo 8 de octubre.

Pero, recientemente, el cabecilla del autodenominado Estado Mayor Central (EMC) ha presentado condiciones al Gobierno de Gustavo Petro a solo unas horas de la programada mesa de paz en el norte de Santander.

“Sin un decreto de cese al fuego, no se instalará la mesa; el Gobierno debe cumplir lo acordado”, afirmó el líder de esta organización guerrillera.

Curiosamente, Ernesto Samper, ex presidente de Colombia, fue quien sugirió que el presidente Petro decrete un cese al fuego bilateral para avanzar en la negociación de paz. Samper expresó:

«Dilatar el cese es mantener abiertas las puertas para que el conflicto siga cobrando víctimas inocentes de acciones inhumanitarias en las zonas de guerra».

Ante esta solicitud de Samper, ‘Mordisco’ aprovechó para imponer sus propias condiciones, lo que ha generado incertidumbre sobre si la mesa de diálogo se instalará este fin de semana o si será necesario posponerla.

La subcomisión encargada de ajustar los protocolos para el cese al fuego de las Farc emitió un comunicado en el que afirma que el Gobierno de Petro no está cumpliendo con lo acordado. En el escrito señala que el Gobierno introdujo elementos no discutidos previamente en el acuerdo de cese al fuego y se considera una provocación.

Además, se acusa al Gobierno de Petro de ordenar ataques militares que humillan a las comunidades y se interpreta como una estrategia de guerra psicológica.

Aunque el comunicado no menciona directamente las acciones terroristas en curso en varias regiones, sí responsabiliza al presidente Gustavo Petro, al ministro de Defensa Iván Velázquez y al Alto Comisionado para la Paz de sabotear los documentos surgidos de la fase exploratoria y de un posible incumplimiento en la instalación de la mesa de diálogo.

En un evento en el que se presentó y socializó la nueva Política Nacional de Drogas 2023-2033, el presidente de la República, Gustavo Petro, hizo una contundente advertencia a las disidencias de las Farc a tan solo cinco días de que su administración instale una mesa de diálogo con el Estado Mayor Central, liderado por alias Iván Mordisco, tras la violencia que se vive en el Cauca.

El presidente Petro, en medio de la presentación de esta política que marca un cambio de paradigma en el abordaje de las drogas ilegales en Colombia, enfatizó la necesidad de promover la paz y la reconciliación en el país. Sin embargo, también dejó claro que no tolerará actos violentos que amenacen la estabilidad y la seguridad de la nación.

Petro enfatizó la necesidad de tomar medidas decisivas en esta región, argumentando que la economía ilícita relacionada con el narcotráfico no puede seguir financiando la violencia y la muerte en Colombia. El mandatario hizo un llamado a la acción y dejó claro que no tolerará la continuidad de actividades ilegales que pongan en peligro la seguridad de la sociedad colombiana.

“Yo he dado la orden a todos los miembros del Ejército de tomar el plateado. Yo la di, ahí no puede haber confusión, sinceramente, después que habían matado a unos policías allá en otros pueblos. La di porque esta economía no puede seguir financiando la muerte de la sociedad colombiana”, expresó Petro.

Además de dirigir su mensaje a las Fuerzas Militares, Petro también envió una fuerte advertencia a los miembros de las disidencias de las Farc. “No nos podemos vestir de revolucionarios y ser traquetos, eso no se permite”, declaró el mandatario.

Con esta afirmación, Petro hizo hincapié en la importancia de mantener la integridad y el compromiso con los principios revolucionarios en lugar de involucrarse en actividades criminales.

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